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21 Pág. Música Gonzalo Montero, cantautor

 

—¿Cómo surge la idea de “En Amor-al-Arte”?

—La idea nace de dos historias aparentemente sin relación. La primera es que cuando inicié mi página web (allá por el 2003), descubrí un montón de gente que tiene inquietudes y aptitudes artísticas y culturales, pero que se quedan en el tintero por aquello del pudor o la vergüenza. La sociedad impone el patrón de que “eres realmente muy bueno” o si no, el arte queda para el ámbito más íntimo de cada uno. Entonces incorporé en mi web una sección de colaboraciones de música, literatura, pintura, dibujo, fotografía, etc.…, en la que han participado más de 25 personas de todas partes del mundo.

La segunda historia empezó porque en alguno de mis cumpleaños he aprovechado para organizar algún concierto íntimo. Sin embargo, en el último surgió hacer una celebración en la que además de cantar yo algunas canciones, otra gente aportó su granito de arena. Mayte hizo un cuentacuentos, Sergio nos dio una clase de merengue, etc… Se creó un ambiente tan especial, que pensamos que un espacio de ese tipo, totalmente abierto y con un clima positivo y de confianza era una idea genial para poner en práctica y abrirla al mundo.

La unión de estas dos ideas con la firme convicción de que compartir nuestros dones e inquietudes con los demás es algo realmente maravilloso que nos hace más humanos y mejores, es lo que ha hecho nacer “En Amor al Arte”.

—¿Es difícil para un cantautor hacerse de un sitio en el mundillo artístico?

—Imagino que sí. Hoy día es un género en cierto modo supongo que en general es difícil para cualquiera que quiera vivir de ello. Para mí siempre ha sido una afición enriquecedora y humana incompatible con las exigencias de una “industria” como es la de la música y la cultura.

¿Cómo han influido las redes sociales en la promoción de tu trabajo,  piensas que facilita el que más gente te conozca?

—Por supuesto que sí. En 2003 cuando empecé con mi web, internet me abrió muchas puertas y posibilidades. Ahora con las redes sociales, es un escalón más, aunque aún a mucha gente le cuesta mucho utilizar las posibilidades de interacción que ofrecen.