
Jaime, escritor chileno, parte del staff de ZK 2.0, que a estas alturas no requiere de presentaciones. Una vez más nos obsequia con otra de sus ocurrencias, con su talento para arrancarnos una sonrisa.
*****
La enfermedad de Ofelia
Agazapado entre los matorrales me aproximé en silencio a la pequeña poza de agua formada por una vertiente, dispuesto a cazar alguna de las tórtolas que iban a beber; claro, como chiquito de 7 años de edad no había logrado atrapar ninguna.
Escuché voces más abajo, miré por curiosidad y allí estaba Ofelia, una campesina joven, bonita con todas sus curvas muy bien dispuestas; estaba refunfuñando porque el huaso Floridor trataba de tomarla por la espalda, mientras lavaba ropa que sacaba de un canasto.
Floridor un joven de unos 25 años, sí que era hábil cazando tórtolas, ahora parecía querer jugar con Ofelia.
—Anda, Ofelia, poh —mientras hablaba sus manos la tomaron de los hombros por detrás. El juego debe haber sido entretenido, porque ella no hacía nada por huir, se limitaba a dar manotones al muchacho.