NERY GARCÍA PORTA
XABIER CID VIDAL
Alfabetización científica
ciudadanos responsables para una sociedad sostenible
Parece en principio indiscutible que la ciencia ha realizado y realiza una aportación fundamental a nuestro bienestar. Todo el mundo está de acuerdo en que sin los avances tecnológicos y médicos la vida actual sería muy distinta. Ahora bien, ¿puede tener también la ciencia o, mejor dicho, la alfabetización científica, un papel relevante para mejorar nuestra sociedad en otros ámbitos?
Una posible manera de encarar esta cuestión sería plantearse cómo variaría la forma de enfrentarse a determinados temas ya no sólo con una mayor base de conocimientos, sino también con una mayor visión científica. Esta visión puede entenderse como rigurosa, objetiva y crítica al mismo tiempo. Tres adjetivos que no encajan en la mayor parte de los casos son cómo los ciudadanos toman sus decisiones o analizan la información que reciben.
Podemos pensar en determinados “remedios milagro”, y de cómo la ausencia de una cultura científica y análisis suficiente permite que un porcentaje importante de la sociedad ya no sólo se los crea, sino que también invierta económicamente en ellos. Así, una mayor base de conocimiento permitiría saber que cualquier solución médica pasa por un periodo de ensayo clínico y por una publicación especializada antes de llegar al mercado. Una mejor capacidad crítica significaría además un mayor contraste de la información, sin tomar ciegamente lo que nos llega de cualquier medio de comunicación.