El cadalso era la única salida para un
médico que dijera a Enrique VIII que
podría morirse. Pues pensar en la
muerte del Rey era considerado
traición. Y la pena de la traición... la
m uerte. Es por eso que la Familia Real
no podía asistir a funerales públicos

Otra opción habría sido amputarle la pierna
herida. Véase en la imagen la
descripcióngráfica de cómo se hacía

Su esposa, Ana Bolena, había dado a luz a una niña que se convertiría en Isabel I de Inglaterra, la Reina Virgen. Aún así, Enrique no podía prever el exitoso reinado de su hija y seguía buscando un heredero que no llegaba con Ana Bolena, que fue ejecutada por presunta traición al Rey por haberle sido infiel con varios cortesanos e incluso con su hermano, por lo que fue acusada de adulterio, incesto y alta traición. No obstante, muchos historiadores parecen indicar que los cargos presentados contra A
Jane Seymour, dicen que
con la tercera va a la vencida...na Bolena eran falsos y que todo era un complot de palacio para acabar con su vida, con un Enrique que tenía una amante conocida, Jane Seymour, quien fue la siguiente reina.

Pero tras la muerte de Ana Bolena, Enrique se encontró con una Inglaterra dominada por los protestantes que él mismo, bajo la influencia de Ana Bolena, había subido al poder del país. No obstante, en su tercera esposa, Jane Seymour, conservadora, veía una forma de volver al pasado donde los problemas religiosos no eran más que un puñado de protestantes reuniéndose a escondidas del Rey. Pero con sus decisiones, Enrique se había convertido en un déspota cruel. Aproximadamente, unos 70.000 de sus súbditos murieron por su reforma religiosa.