¡Total! Que la Lagartija Trapisondas que se enteraba de todo, aquella semana, escribió un artículo explicando que el Alcalde Don Amarilis, estuvo casi un mes en cama limpiándose las plumas con colonia de violetas y aceite de benjuí.
Pero todo este lío tuvo un buen final y es que sirvió para que el Jardín de Milagritos, adelantara las elecciones para elegir un Alcalde propio y no tener que llamar a ninguno de otra Urbanización. Así que convocaron a todos los hombres para que presentaran sus candidaturas. Pero todo esto es otra historia que ya explicaremos en otra ocasión, cuando suceda el evento.
En fin que aquel día, los únicos que salieron ganando fueron la Urraca Pica-Pica que se llevó un montón de perlas de tantos collares como se rompieron y el Topillo Pitymy que se las compró a bajo precio y las guardó esperando una buena ocasión para venderlas al doble de lo que le habían costado.
Pero no le salió tan bien el negocio como esperaba, no creáis, porque la gente recordó tanto aquel accidente de Milagritos que se gastaron todo el dinero en comprar la Revista "Dimes y Diretes" donde explicaba con pelos y señales todo lo sucedido y además estaba llena de fotos con Milagritos por el suelo y los invitados bañándose en la piscina para librarse de la pringosa miel.
Y eso... no se ve todos los días... Bueno, a lo mejor os lo explicamos en otra ocasión. Ahora vamos a observar como las Hormigas trabajadoras ponen orden en el jardín para que todos puedan descansar por la noche.