Ahora proyectamos realizar juntos la aventura de escribir un libro de relatos, partiendo de lo que publicamos aquí. La música sigue siendo otra de mis grandes pasiones, pertenezco a tres coros de la localidad. El coro parroquial, un coro de padres del colegio de mi hijo pequeño y uno más ambicioso que se llama Son de los Santos. Con este último acabamos de grabar un disco que pronto saldrá al mercado local de momento, esperemos que guste. Habaneras, boleros y pasodobles completan nuestro repertorio. Poco más que contar, os dejo mi página de quieroquemeleas por que es la única en la que escribo en la red.
Para seguir la obra de Manu, pueden visitarle en:
http://keidell.hightoxic.com/manu-lopez-f100/
EL ABUELO
-Abuelo, ¿Por qué no te conozco?
-¿Cómo? Soy yo, tu yayo, aquel con el que paseabas cada tarde, con quien compartías la merienda que preparaba mamá, el que se duerme contigo viendo las series juveniles, ¿Por qué preguntas eso?
-Sé quién eres, pero llevamos muchos años juntos y aún no te conozco, no sé, ¿cómo fue tu infancia?, ¿quién fue tu primera novia?, ¿alguna vez pasaste hambre?, ¿lloras por las ausencias de los que ya se fueron?, ¿empuñaste un arma?, ¿la usaste?...
-¿Para qué quiere saber un chico de 16 años todo eso? Ahora estoy aquí contigo, es lo importante, lo pasado es mejor dejarlo enterrado, ¿no crees?
-No, eso no me vale. Puede que algún día me encuentre con alguien que me diga... tu abuelo fue un tirano, o a mí tu querido abuelo solo me hizo sufrir, o por el contrario pueden decirme, que buena gente fue el abuelo Pedro, ¿te contó alguna vez que hicimos tal cosa?, o ¡qué bien nos lo pasamos juntos tu abuelo y yo tal día! Entonces yo puedo replicarles, puedo defenderte o decir lo hizo por esto o por aquello. A eso es lo que me refiero, ¿somos amigos?, pues trátame como tal.
El abuelo se quedó un rato pensando, quizás su nieto tenía razón. ¿Por qué no contarle?, había cometido tropelías, pero siempre arrastrado por las circunstancias de la vida, la guerra, el hambre, las miserias humanas y la supervivencia, ante todo eso, había aprendido a subsistir. Se consideraba buena persona, así que decidió que le contaría su vida.
-Está bien, te contaré mi historia, espero que comprendas muchas de las cosas que te voy a explicar, a veces yo me arrepiento, fueron años muy duros, cuando sepas, a lo mejor ya no me miras con los mismos ojos. Espero puedas aceptar que no tuve otra opción en algunos momentos o quizás sí..., quién sabe.