He leído declaraciones tuyas acerca de que no eres músico de conservatorio, sin embargo, compones música. Podemos decir entonces, que eres un virtuoso. El no estudiar no te ha impedido tocar  la guitarra y ser compositor, ¿Tocas algún instrumento más?
Bueno, en mis tiempos ir al Conservatorio  no estaba  ni si quiera bien visto para los chicos. Se consideraba más bien apropiado para las chicas… No sé, cosas de “entonces”. Además fue el principio del “Rock & Roll” y aquello, que era nuevo, no era muy de  Conservatorio.

Por supuesto no soy ningún virtuoso, más bien un guitarrista modesto  que aprendí lo que sé a base de intuición y de miles de horas de ensayo y escenario, como la mayoría de los músicos de mi tiempo. Después de la guitarra aprendí a tocar el bajo y fui  bajista en  grupos y bandas y orquestas de baile.

¿Tu familia te ha apoyado en esta carrera?
Sí. Siempre han entendido y respetado mis deseos.

Tienes un álbum que se llama “30 años”. Si miras hacia atrás, ¿qué puedes decir acerca de esos años?
“30 Años” es el título de mi primer disco autoeditado y el tiempo que comparto con mi mujer... Maravillosos.

¿Cuántos discos has grabado?
Dos. El primero, “30 años”, en 2005 y “Un hombre afortunado”, en 2009