En esta ocasión presentamos a Salvador Negrete Alfaro, de 41 años. Vive en Estados Unidos desde hace algunos años, pero es de origen mexicano, nacido en Tecoman Colima, ciudad costera del Pacífico.

Lugar que el mismo Salvador describe con cariño y nostalgia, no solo por ser su ciudad natal, sino que además por ser un paraíso natural, que rezuma belleza y encanto.

Nos contó que proviene de una familia humilde, pero trabajadora y honesta. Sus padres, promotores directos de su calidez y sensibilidad, le inculcaron firmes valores, que aprecia y agradece.

Su padre pese a ser un sencillo hombre de trabajo duro, como obrero, le transmitió esa hombría de bien y amor por la familia.

Su madre, por supuesto como muchos hijos, que se ha criado con mucho apego, expresa que le adora y de alguna manera ha sido su consentido, ya que al parecer, Salvador tenía muchas prisas por nacer y apareció en este mundo como sietemesino, lo que por momentos le hizo temer por su vida.

Por supuesto, el tiempo le hizo ver que Salvador, no estaba dispuesto a dejarse vencer por estos tecnicismos de tiempos...

Ha crecido y se ha dejado atrapar por la lírica, toda esa sensibilidad necesitaba ver la luz a través de sus poemas, que por cierto son bellas composiciones con un gran cargamento de emotividad, pasión y ternura.

En su día a día de dedica a la electrónica y asegura que aunque no esté todo bien, trata de afrontar la vida con una sonrisa. El solo hecho de amanecer cada día, le resulta maravilloso, aún en este mundo que muchas veces nos complica la vida.

Pero eso no opaca  su visión del amor, la esperanza, del sentir a través de la poesía. Aún no ha publicado ninguna obra, pese a que escribe desde hace años, sin embargo eso no ha diluido su romance con la lírica y es su deseo  continuar hasta “que ya no pueda hacerlo”.

Otra de las grandes pasiones de nuestro amigo es la pintura, una habilidad que quizás algún día, se anime a compartir con ZK y con nuestros lectores.