Así pues, el índice de mortalidad de este sismo no tiene comparación con ningún otro que haya sucedido en tiempos modernos. Pensemos que en el terremoto del 12 de Enero hubo casi 300.000 muertos sobre una población cercana a 10 millones. Para dar una referencia, el tsunami asiático del 2004 mató la misma cantidad de personas pero sobre una población afectada de más de mil millones. Y si lo comparamos con el reciente terremoto en Chile, aun mucho más potente, las cifras de mortalidad relativa son muy superiores.
Por eso insisto que Haití no es un país pobre sino que fue empobrecido y es la razón de la tragedia que hoy vive. Su pueblo, que es alegre y hospitalario, no necesita de soldados ni de fuerzas de ocupación. Tampoco que se lleven sus niños. Precisan de médicos/as, de enfermeros/as, de maestras/os, de manos solidarias que les ayuden a reconstruir nuevamente ese país entrañable.
15. En una entrevista dijiste que la solución a los problemas del mundo eran la ESPERANZA Y LA CONEXIÓN CON EL COSMOS. Cómo crees que se logra ó cómo vos logras esa conexión con el Cosmos ó con el TODO ?
Es muy fácil, todos estamos en condiciones de lograrlo: hay que despegar un poco los pies del suelo, hay que dejar volar la imaginación, hay que estudiar y educarnos a no temer al Otro. Hay que poner fin al “Choque de Civilizaciones” que nos quieren imponer y hacer creer. El único choque es el de intereses mezquinos de corazones enfermos de poder, de codicia, de avaricia versus los que pensamos que el mundo está hecho para todos y para el disfrute de todos y no de unos pocos.
Hay que mirar otra vez hacia arriba, hacia las estrellas, hacia el Cielo, el manto protector. Hay que entender que la diversidad humana es consecuencia de la diversidad geográfica del planeta y es riqueza, no es para temer.
Después hay que abrir el corazón, apagar las luces y tirarnos todos a ver el Cielo, el firmamento. Hace pocos días atrás, apagamos las luces en todo el planeta para tomar conciencia del cambio climático y los efectos destructivos que el consumismo desenfrenado están dejando sobre el planeta…Yo agregaría a este acontecimiento un complemento: haría una jornada mensual de una hora, en todo el mundo, de apagar todo y tirarnos a ver el Cielo, estemos donde estemos…Un momento en que todos los humanos volvamos a unirnos mirando otra vez las estrellas, el Sol, la Luna, los planetas…Que volvamos a comprender que nacimos en un lugar, el África, y que desde hace millones de años estamos caminando y poblando la superficie de la Tierra sin par…pero que somos todos una única familia. Alejada ya por las distancias, pero vuelta a unir otra vez gracias al ingenio de la mente humana, gracias a la tecnología moderna, al esfuerzo; que entendamos otra vez que no somos Dios, somos apenas una más de las creaturas que pueblan el Cosmos.
Que entendamos alguna vez que, cuando mato a mi “enemigo”, muere una persona pero en el corazón han muerto dos. Que entendamos que la vida es lo más sagrado que hay, que costó millones y millones de años de evolución hasta llegar a nuestra especie y que sigue siendo un Milagro del Creador darla y no está en nuestras manos quitársela a nadie, aunque lo hagamos en Su nombre.