No solemos hablar de series españolas, pero como a mí ésta me ha gusta mucho, he decidido tratar el tema. Los protegidos narra la historia de un grupo de personas que se conocen bajo extrañas circunstancias y que tras una infinidad de problemas, logran establecerse como una familia en su nuevo hogar en Valle Perdido. Antes de hablar de cómo ha sido su audiencia, podemos hablar un poco de sus personajes, algunos con habilidades de película.

Dentro de la familia Castillo Rey (apellidos inventados en el momento de responder a la típica pregunta “¿sus apellidos son… ”) nos encontramos con Jimena García (Angie Cepeda),una madre desesperada por el secuestro ‘anunciado’ de su verdadera hija (que podía ver el futuro), frustrada por los continuos problemas en Valle Perdido, pero feliz de contar con el apoyo de su improvisada familia. Está continuamente tras cualquier indicio que la lleva hasta su hija. Luego está Mario Motero (Antonio Garrido), viudo desde hace dos años y con un hijo, Carlos (Daniel Avilés), que también se une a esta particular familia. El niño posee la habilidad de la telequinesis, es decir que con la mente mueve, no sin cierta dificultad, cualquier objeto e incluso a sí mismo elevándose en el aire.

La pequeña de la casa es Lucía (Priscila Delgado), ahora hermanita de Carlos. Puede oír el pensamiento de quienes la rodean. Tras la muerte de su padre adoptivo, Silvestre (Paxti Freytez), la niña se queda con Jimena y los demás en la casa que en principio entraba en los planes de Silvestre.