


*Consuelo en la sala, junto al gran trozo de la muralla que sirve de medianera.
En las otras fotografías el sitio donde se tapiaron las almenas. Aquí está la prueba de que sí existían. Los datos de laboratorio dataron las muestras del material en esos sectores de la década del ’50, mientras que el resto está datado en el siglo XI.
Para la familia Rosende, esto ha sido un cambio enorme en sus vidas. Aún no pueden creer que ellas hayan jugado, crecido y convivido con la historia. Que cohabitaron con la memoria de tantos sucesos y hechos de gran relevancia en Galicia.
Después de la rehabilitación, de acuerdo con las normas conservacionistas, la casa sigue teniendo su aspecto ancestral, pero con el confort que se requiere en esta época. Es un hogar acogedor y señorial.


*Imágenes de las diferentes estancias que disponen para
los que deciden pasar allí su visita a Santiago.