Gustavo Silva, Taviro, como se ha dado a conocer en el mundillo literario. Nació en Buenos Aires, un 20 de agosto de 1960. Su sensibilidad y talento para lo artístico le marcó en su profesión como dibujante y diseñador gráfico, claro está además de escritor. Su poesía, rezuma agudeza, ironía y genialidad.
Como un buen argentino, entre sus obras, podemos encontrar desde temas relacionados con el tango, amores y desamores, acerca de la vida y la muerte. Las realidades sociales y la política también están presentes, pero siempre dentro de una visión crítica, atinada y sin medias tintas. Tanto en el ámbito literario como en sus dibujos, lo real con la metáfora se mezclan dando como resultado un trabajo con su marca personal. Un autor, con el genio suficiente capaz de recrear obras que van desde la tristeza más profunda, hasta el humor más satírico.
Hasta ahora ha publicado algunas obras. Estos son algunos de los títulos: “El riesgo al infarto de miocardio, debido a la prolongada contemplación de la lluvia”; “Un viejo, muy viejo colgado de una guirnalda”; “Little red rooster blues”; “Crónicas del último cielo”, entre otras. Muchos de sus poemas los ha representado en dibujos a tinta o en acuarelas. Actualmente está trabajando sobre un recopilatorio de sus poesías y algún que otro relato, titulado “Milonga triste o blues de la Isla Maciel”.
Escribe para Quieroquemeleas.com y Textale, dos sitios para lectura y escritores.
Revista ZK2.0, les invita a conocerle a través de su trabajo.
El silencio como una mancha
El silencio como una mancha
como esa mancha de humedad
que me apunta desde la pared
y me dice aquí estoy imperturbable;
que ves en mí
|
|
con esos ojos
veo un perro rabioso sacudiendo por el cuello al sol
un conjunto de islas y me voy de corsario
por esos mares de tizne
a que me embelesen y ojalá se propasen las sirenas
|
Continúa >>